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sábado, 8 de marzo de 2014

ABRE EN ÁFRICA EL PRIMER HOSPITAL PARA REPARAR MUTILACIONES DE CLÍTORIS

Una ONG que lucha contra la ablación, creada por el movimiento raeliano, lanza en Burkina Faso el Hospital del Placer, donde cirujanos expertos reconstruirán el clítoris de mujeres mutiladas. La secta, que defiende la liberación sexual, asegura que no usará el centro para hacer proselitismo.

Ilustración: Robert Carter


El próximo 7 de marzo, la vida de miles de mujeres africanas puede cambiar para siempre. En una región en la que al 82% de las mujeres se les ha arrancado el clítoris en su infancia, se alza al fin el primer centro hospitalario dedicado íntegramente a reparar la mutilación genital femenina, mediante una técnica quirúrgica que pretende devolver la dignidad y sobre todo el placer sexual a algunas de las 125 millones de niñas y mujeres que han sido víctimas de esta salvaje tradición. La semana que viene, en Burkina Faso, comenzará a funcionar el que llaman el Hospital del Placer...


No obstante, esta feliz inauguración tiene un aspecto controvertido: el centro, que cuenta con algunos de los más renombrados cirujanos en la materia, no ha sido financiado por la Organización Mundial de la Salud, un gobierno o una ONG sanitaria cualquiera. La organización que después de varios años ha logrado recaudar los 400.000 dólares (290.000 euros) necesarios para levantar el centro es Clitoraid, una ONG dedicada a combatir la ablación que fue fundada por el líder de la secta de los raelianos.

Ubicado en Bobo-Dioulasso, la segunda ciudad más grande de este país de África occidental, el Hospital del Placer evitará que las mujeres mutiladas tengan que exponerse a operaciones arriesgadas con cirujanos inexpertos o a gastarse el salario de dos años para viajar hasta centros médicos de Europa o EEUU. Las primeras pacientes que ya tienen concertada cita vienen tanto de Burkina Faso como de otros países de la región como Malí o Guinea “e incluso de países más lejanos como Kenia”, explica una portavoz de Clitoraid.

El centro pretende avanzar en una nueva dirección en la lucha contra la ablación clitoriana: más allá de las imprescindibles campañas de prevención y educación, aspira a mejorar la vida de las mujeres mutiladas en todo el mundo, esencialmente 29 países de África y Oriente Medio. No en vano, este centro ofrecerá las operaciones de manera gratuita para las víctimas.

Sin embargo, esta buena obra que adelantaba la prestigiosa revista The Lancet en su último número tuvo su peculiar origen en la mente de Claude Vorilhon, el líder de este movimiento que fundó en 1974, que es considerado una secta peligrosa en Francia y una simple religión en EEUU. Conocido como Raël, tuvo la visión de construir este hospital en cuanto supo de la existencia de una nueva técnica quirúrgica capaz de devolver el placer sexual a las mujeres víctimas de la mutilación genital.

Una secta peculiar

Los raelianos, que creen que la vida en la Tierra fue creada por extraterrestres y que la inmortalidad es posible a través de la clonación, consideran el placer sexual uno de los pilares de su movimiento y siempre han apoyado el reconocimiento y los derechos de las minorías sexuales. Y es algo que llevan a gala frente a otras religiones: según explica a Materia la directora de comunicación de Clitoraid, Nadine Gary, el principal problema para obtener fondos para el hospital ha sido la moral religiosa y “el tabú de la sexualidad que el cristianismo y otras religiones han perpetrado durante siglos”.

“Hasta el momento”, asegura Gary, “la mutilación genital femenina sólo se ha combatido con campañas de prevención, pero hasta ahora ninguna otra ONG se ha ofrecido nunca para ayudar a los millones de mujeres que ya están mutiladas genitalmente y que buscan desesperadamente recuperar su identidad, su dignidad y el placer sexual”. Desde su perspectiva, el mensaje de que la ablación es reversible podría desalentar a los partidarios de esta cruel práctica.

En Clitoraid no entienden que su origen raeliano deba destacarse en esta noticia, ya que consideran que el objetivo del hospital, que cuenta con una lista de espera de cientos de mujeres, es trascendental y ajeno a las actividades del movimiento. “Para ser claros”, defiende la portavoz de Clitoraid, “los raelianos han sido los principales actores para la recaudación de fondos pero contamos con muchas más personas involucradas que no son raelianas. Nuestra cirujana jefe no es raeliana. Este hospital es un lugar para sanar y el proselitismo se queda fuera de las instalaciones”.

Eso sí, Gary considera la existencia misma de este hospital como una importante declaración de intenciones. Del mismo modo que los misioneros cristianos reparten víveres junto a la iglesia, es fácil suponer que este hospital pueda funcionar como reclamo. No obstante, como explicaba una experta en el movimiento raeliano en Wired, sería una forma excesivamente cara de atraer vocaciones en comparación con otras religiones.

La jefa del equipo médico de la que habla la portavoz es Marci Bowers, una cirujana experta en cirugía reconstructiva, pélvica y ginecológica, una de las más reconocidas especialistas en operaciones de reasignación de sexo (ella es transexual): según advierten por email al contactarla, la lista de espera para acudir a su clínica de EEUU supera el año. Según explica Bowers a esta redacción, ella será la cirujana jefe y también quien realizará el 2 de marzo la cirugía inaugural del Hospital del Placer, donde permanecerá dos semanas operando y posteriormente adiestrando a otros especialistas en esta técnica de reconstrucción del clítoris mutilado.

Cirugía y proselitismo

“La sexualidad debe ser considerada como uno de los sentidos humanos básicos”, asegura Bowers. Y añade: “La ablación es como llevar a nuestros hijos a que les arranquen los ojos o su sentido del oído. Es una barbaridad y todos debemos reaccionar indignados ante la mutilación genital femenina: lo importante es hacer lo que podamos para devolver ese sentido”.

Su trabajo de cirugía se basa en un método ideado por el cirujano francés Pierre Foldès: el clítoris como órgano es un iceberg, y a pesar de mutilarlo en la vulva queda buena parte del tejido nervioso, que se aprovecha para reconstruir esta función y las sensaciones placenteras. Foldès, que también asesorará al equipo médico del hospital, publicó los resultados de su técnica el año pasado en The Lancet con números espectaculares: de las casi 3.000 mujeres operadas (la mayoría de África occidental), el 81% aseguró haber experimentado una mejora de su vida sexual y el 51% había experimentado el orgasmo. Otros colegas británicos consideran exageradas sus cifras.

“Es una cirugía delicada pero, con todas sus limitaciones, funciona”, defiende Bowers. “La ablación no acaba con todo el clítoris, contrariamente a lo que se cree, lo cual es un reflejo del desprecio histórico por la sexualidad femenina y la falta de conocimiento del tamaño y extensión de las zonas erógenas femeninas”, explica.

En cuanto al origen raeliano de Clitoraid, Bowers lo tiene claro: para ella lo único que importa es mejorar la vida de las mujeres y está segura de que no se le daría la misma importancia a los impulsores si pertenecieran a otro credo. “El respaldo raeliano a la iniciativa es noble por la causa que representa. El hecho de que el raelianismo sea una religión extraña o inusual influye tanto en la cirugía como si hubiera sido apoyada por judíos o por el Sacro Imperio Romano”, zanja.


sábado, 21 de diciembre de 2013

EL REY JUAN CARLOS COMO INTERMEDIARIO EN LA VENTA DE ARMAS

Varias ONG denuncian por cuarta vez la venta de armas españolas a Marruecos para la represión del pueblo saharaui.


Diversas ONG de defensa del pueblo saharaui denunciaron el pasado mes de julio, en un acto público ante el Ministerio de Economía en Madrid, al Gobierno español por la venta de armamento a Marruecos, una circunstancia que infringe la legislación internacional que regula la exportación de armas a países en conflicto. La denuncia, presentada no sólo en acto público sino también ante los tribunales, va acompañada de una serie de documentos, entre ellos fotografías y vídeos, que demuestran que el material comprado a España ha sido utilizado por las Fuerzas de Seguridad marroquíes en la represión del pueblo saharaui.

Es el cuarto año consecutivo que estos organismos acusan públicamente al Gobierno de vender material bélico –tanques, todoterrenos y armas– al monarca marroquí, Mohamed VI, quien el mismo lunes dio la bienvenida al rey Juan Carlos I, al ministro de Exteriores y a sus acompañantes, que llegaron al país vecino para debatir sobre sus intereses comerciales comunes.

LA VENTA DE ARMAS A MARRUECOS

La venta de armas a Marruecos no es algo actual. Según ha explicado Eduardo Melero, abogado y miembro de Justicia i Pau –una de las ONG denunciantes–, “desde 1995 hasta 2012 España ha exportado material bélico a Marruecos por valor de más de 250 millones de Euros de forma ininterrumpida”. A estas cifras, calculadas sólo hasta 2012, hay que añadirle la venta de material del año vigente. A pesar de que no se han encontrado datos detallados sobre ella, el pasado mes de abril el ministro de Defensa español, Pedro Morenés, y el de Marruecos, Abdeltif Loudyi, se reunieron en la fábrica de Urovesa, una empresa encargada de fabricar vehículos militares, en Santiago de Compostela.

JUAN CARLOS, INTERMEDIARIO 

Las ONG han aprovechado la visita de Juan Carlos I a Mohamed VI, y han manifestado su descontento con la intención del monarca, que “con sus visitas a Marruecos no sólo pretende mejorar las relaciones internacionales, sino que trabaja como intermediario en la venta de armas”, según ha afirmado Melero. Las denuncias anteriores han sido desestimadas por los tribunales, que han alegado que toda información “acerca de la exportación de armas es secreto de Estado”. Melero se ha indignado ante la situación, ya que “basándose en el secreto de Estado el Gobierno impide que podamos plantear una demanda judicial”, ha añadido. Por su parte, Luis Mangrané, miembro del Observatorio Aragonés por el Sáhara Occidental, ha recalcado que a pesar de que el Gobierno se empeñe en calificarlo como secreto estatal, “la exportación de armas es un secreto a voces”.

REPRESIÓN EN EL SAHARA

La legislación internacional prohíbe la venta de armas a países que mantienen algún conflicto en su territorio, sin embargo, España se ha saltado esta ley desde hace años y ha olvidado el conflicto del Sáhara Occidental. La Coordinadora Estatal de Acciones Solidarias con el Sáhara (CEAS-Sáhara), una de las organizaciones denunciantes, envió junto a otras ONG una carta al rey antes de su visita a Marruecos con el objetivo de pedirle que tuviera el “coraje de asumir sus responsabilidades” para con el pueblo saharaui, un pueblo “al que España abandonó y con el que tiene una deuda histórica”.
Días después del envío de la carta y de que comenzara la visita oficial de Juan Carlos I en territorio marroquí, éste sigue negociando sobre sus intereses comerciales con el monarca marroquí, entre los que se encuentra la venta de armas.

Uno de los activistas saharauis, Hassana Aalia, estaba presente en el acto público de denuncia ante el Ministerio de Economía. Durante el acto, ha mostrado su preocupación por la situación y ha afirmado que “es una vergüenza que los intereses económicos estén por encima de los Derechos Humanos”. Ha sido Aalia quien ha asegurado que junto a la denuncia han presentado documentación que demuestra que el material bélico español, principalmente tanques y todoterrenos militares, han sido utilizados para reprimir al pueblo saharaui. “Cuando yo estuve en el Campamento de la Dignidad –el Gdeim Izik, situado a las fueras de El Aaiún– pude ver cómo utilizaban los vehículos, y tenemos fotos y vídeos para demostrarlo”, ha asegurado. Aalia fue acusado junto a otros 23 activistas saharauis de matar a once soldados durante el desalojo del Campamento de la Dignidad, y condenado in absentia el pasado 18 de febrero a cadena perpetua. Actualmente vive en España a espera de poder presentar algún recurso para que su sentencia, de la que se enteró a través de la radio, quede anulada.

Mientras tanto, las ONG siguen en su lucha por denunciar la venta de armas a Marruecos, exigiendo que se denieguen las autorizaciones para exportar armas a países en conflicto y que se revoquen las concedidas. Sin embargo, Melero ha explicado que “todos los años el tribunal falla a favor del Ministerio y la denuncia queda desestimada”.

Fuentes:
www.diagonalperiodico.net/global/rey-juan-carlos-trabaja-como-intermediario-la-venta-armas.html