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sábado, 10 de septiembre de 2016

EL CAMPO DE CONCENTRACIÓN DE ALBATERA

La escritora cartagenera Isabel María Abellán publica 'Isidro', una novela basada en la historia real de un republicano anarquista que sobrevivió a uno de los campos más crueles del franquismo..

Campo de concentración de Albatera (hoy en día desaparecido)

viernes, 23 de enero de 2015

CARTA A PEDRO ALMODÓVAR DESDE EL DOLOR DE LAS VÍCTIMAS DEL FRANQUISMO

Estimado Pedro Almodovar, me dirijo a usted como familiar de varias víctimas del franquismo, concretamente de mi abuelo Francisco González Santana, fusilado el 29 de marzo de 1.937, de mi tío Braulio, de solo cuatro meses, brutalmente asesinado en su cuna por un falangista en el antiguo municipio de San Lorenzo, isla de Gran Canaria...



Aquí en Canarias Pedro, fueron asesinadas más de cinco mil personas fieles a la República, ni una del bando nacional, en una tierra donde casi no hubo resistencia al golpe de estado fascista, pero que los esbirros de Franco aprovecharon para exterminar impunemente, acabar con toda una generación de personas decentes y defensoras de la democracia y la libertad.

En estas islas fueron muchos los fusilamientos, las personas desaparecidas, arrojadas a pozos, simas volcánicas, enterradas en ocultas fosas comunes después de ser tiroteadas, como la de Federico García Lorca, para que tantos años después los sucesivos gobiernos de esta democracia no nos permitan recuperar algo tan amado, sacarlos de ese terror de tierra, piedras y odio, enterrarlos en un lugar especial, querido, para que podamos dignificarlos y reconocer su memoria, la herencia de su lucha, que nos mantiene en pie, abrazados a la esperanza de un mundo mejor.

Le escribo señor Almodovar, porque he leído que quiere usted hacer una película sobre el franquismo, sobre el dolor de las familias que ahora tantos años después seguimos buscando los huesos de nuestros muertos, sobre los obstáculos que nos encontramos por parte de un gobierno español que nos cierra puertas, de una judicatura que no nos permite que podamos abrazar esos huesos amados, que le demos una sepultura digna, para tener algo tan simple como un lugar donde ponerles flores, orar, rezar, pensar en un pequeño espacio para el recuerdo.

Quiero darle las gracias en nombre de mi familia, de las cientos de miles de familias que en todo el estado español seguimos sin entender que no se haga justicia, que este tremendo sufrimiento no tenga consuelo, que ser familiares de personas que entregaron sus vidas por la democracia y la libertad sea un estigma en España, una burla de quienes ostentan el poder y gestionan una democracia que no sabe, que no quiere rendir tributo a los verdaderos héroes y heroínas del pueblo.

Su inmensa obra como director de cine, como creador reconocido en el panorama internacional, nos hace pensar que podría ayudarnos mucho, que si esa película sale el mundo sabría lo que nos están haciendo, la terrible humillación de un gobierno que nos pisotea, que reconoce solo a los asesinos, que nos acalla con sentencias y autos judiciales, donde nos pisotean argumentando que el asesinato de nuestra gente ya está prescrito, que no nos merecemos nada, solo seguir sufriendo, llorando como nos arrebataron de nuestras manos a tantos seres queridos.

Por eso le escribo estas humildes líneas, me dirijo a usted en nombre tantas personas, tantos corazones heridos, que ansiamos justicia, que sabemos que su película podría abrirnos muchas puertas, resquebrajar esas cadenas que nos oprimen, que premeditadamente tratan de ocultar tantos crímenes, tantas torturas, tantas masacres que nos han arrebatado la posibilidad de tener otra vida.

Agradecerle desde el corazón de la memoria su nuevo proyecto, que la historia que elija sirva para difundir y rellenar tantos espacios vacíos, que las puertas del arte, de la magia creadora, sirvan para que estas heridas abiertas obtengan alivio, que el mundo sepa lo que sucedió en España, que contribuya a romper tantas mordazas de quienes nos niegan la dignidad, nos cercenan la posibilidad de reparar este dolor, de obtener esta ansiada claridad que usted sabe que merecemos.


jueves, 18 de diciembre de 2014

LA QUERELLA ARGENTINA: MUCHO MÁS QUE UN PROCEDIMIENTO JUDICIAL

Conversando recientemente con el abogado Carlos Slepoy, uno de los impulsores de la querella argentina contra los crímenes del franquismo, me comentaba un recuerdo que mantiene muy presente, un momento que significó un punto de inflexión en Argentina. Ocurrió en mayo de 1995 en la plaza de Mayo de Buenos Aires. Acababa de nacer la organización HIJOS, constituida por hijos de personas desaparecidas durante la dictadura de Videla...

Ilustrador: Antoño -- http://altonio.com/contra-la-impunidad-de-los-crimenes-franquistas/


“Eran chicos jóvenes, de 18, 19, 20 años. Uno de ellos habló en la plaza y dijo: “Hasta hace poco ocultábamos quiénes eran nuestros padres, estábamos avergonzados. Ahora estamos orgullosos de ellos”. Fue tal la emoción. Yo sentí que ahí cambiaba la historia. Una generación nueva empezaba a tomar conciencia de su verdadera historia, y no de la que le contaron o distorsionaron”, me comentó Slepoy.

La historia cambió en Argentina. Llegaron las derogaciones de las leyes de punto final y obediencia debida, la recuperación de la memoria, el inicio de la justicia, de la verdad, de la reparación.

Resulta curioso pensar que la justicia española contribuyó a ello. Los juicios contra los exmilitares argentinos Scilingo o Cavallo, impulsados por la Audiencia Nacional española, fueron fundamentales para ir rompiendo la impunidad allá. Slepoy, que estuvo presente en ellos como letrado de la acusación popular, resalta siempre la enorme paradoja que vivimos actualmente, ante el desarrollo de la querella argentina que investiga los crímenes del franquismo. El país que impulsó justicia para naciones como Chile o Argentina niega ahora justicia para sí mismo, protegiendo aún la impunidad de su propia dictadura.

Las organizaciones de derechos humanos internacionales -entre ellas Amnistía Internacional o Human Rights Watch- y la misma Naciones Unidas exigen la investigación de los crímenes del franquismo. La ONU ha solicitado además la derogación de la ley de amnistía.

Hay cosas que ya están cambiando. El clamor internacional es cada vez mayor. A ello se suma la colaboración de jueces españoles con la jueza argentina Servini de Cubría, que lleva la querella. Incluso el hecho de que la magistrada viniera a España marcó de por sí un avance, al igual que las declaraciones por videoconferencia desde España de víctimas y familiares del franquismo.

“El Gobierno español está en una posición incómoda, y eso me hace recordar a la posición de las autoridades argentinas, que durante años negaron colaboración con la justicia española cuando esta perseguía los crímenes de la dictadura argentina. Hasta que finalmente cambiaron las cosas allá. Es verdad, fueron 7 años de dictadura y 12 de impunidad frente a 40 años de dictadura española y casi 40 de impunidad. Más difícil. Pero no imposible”, reflexiona Slepoy.

El franquismo impulsó una persecución sistemática con el objetivo de eliminar a determinados sectores de la sociedad. El daño fue dramático y las secuelas duran hasta hoy, con más de 100.000 desaparecidos aún en las cunetas. Pero a pesar de la enorme represión, a pesar de que los crímenes del franquismo consiguieron remodelar la sociedad española, a pesar de que tras la transición se apostó por el olvido, a pesar de que las nuevas generaciones han crecido ignorando su historia más reciente, a pesar de todo ello, siguen surgiendo nuevas voces que piden respeto por los derechos humanos, verdad, justicia y reparación en nombre de la memoria y de la salud democrática, porque un país que cierra filas para proteger a los represores es un país enfermo. La cultura de la impunidad que sufrimos en la actualidad y que legitima el robo y la mentira, está estrechamente ligada a la impunidad del franquismo.

“Hay una historia muy poderosa. El clamor contra la impunidad del franquismo demuestra que por más mecanismos que se empleen no van a poder taparla. La querella argentina es una expresión de todo esto. No hay pueblo de España, por más pequeño que sea, que no tenga víctimas del franquismo. Imagina qué inmensa reparación va a ser que se empiece a hacer justicia. Por eso la querella es mucho más que un procedimiento judicial. Es un elemento cuestionador de todo el sistema político y de la administración de la justicia española”, explica el letrado.

Cada vez son más las voces contra el olvido. Y, al igual que un día de mayo de 1995 los jóvenes de HIJOS pidieron justicia por los suyos en Buenos Aires, España también necesita recuperar su relato para construir una democracia en la que quede claro que cometer crímenes de lesa humanidad tiene consecuencias. No hay rencor en la reivindicación de la justicia, sino reclamación de herramientas que garanticen que no se repitan atrocidades que a día de hoy ni han sido investigadas por la justicia española, ni están presentes en los libros de historia de colegios e institutos.

Otra cultura es posible. En ella una generación nueva puede empezar a tomar conciencia de su verdadera historia, y no de la que le contaron o distorsionaron. Así se han iniciado siempre los nuevos tiempos.

domingo, 13 de octubre de 2013

ESPAÑA : EL PAIS DE LOS 200.000 DESAPARECIDOS

Representantes de la ONU califican de crímenes contra la humanidad tanto los enterramientos en fosas comunes de la guerra civil y el franquismo como el robo de niños prolongado hasta la democracia. Censuran al Gobierno español por poner obstáculos a las investigaciones y le conminan a buscar a los desaparecidos.


Rocío Borrego sólo quiere recuperar los restos de su madre, puesto que sabe bien que fue asesinada en 1936. Eduardo Raya sólo desea saber el paradero de su hija, puesto que está completamente seguro que sigue viva, desde que fue presuntamente robada en 1990. Entre ambos sucesos ha pasado medio siglo, pero los cubre el mismo manto de silencio e “impunidad”, según los representantes del grupo de trabajo sobre desapariciones forzadas de Naciones Unidas que este mes de septiembre ha visitado diversas ciudades de España. Los afectados repiten insistentemente, con casi 200.000 víctimas, entre enterramientos ilegales en fosas comunes y niños robados, hoy son adultos con identidad falsa, España es, tras Camboya, el país del mundo donde permanecen más personas desaparecidas.

En 1940 la Causa General iniciada por el Ministerio de Justicia sobre el denominado terror rojo facilitó la recuperación de los cadáveres de casi la totalidad de las 38.000 víctimas de la represión en la retaguardia republicana durante la Guerra Civil. Sus familiares, salvo excepciones de falta de interés o deficiente localización, pudieron darles una sepultura digna, fueron honrados, su memoria recuperada y sus verdugos perseguidos o procesados. El Estado se implicó fuertemente en la labor de búsqueda e identificación, sirviéndose en muchos casos de las fotografías tomadas a tal efecto por el propio Gobierno republicano, que nunca llegó a legitimar la barbarie desatada durante parte de esos tres años por facciones de sindicatos y partidos de izquierda...